El gobierno cubano dijo que Payá murió en un accidente de tránsito cerca de la ciudad de Bayamo cuando su automóvil se estrelló contra un árbol, produciendo su muerte y la de otro pasajero e hiriendo a otros dos. Pero la hija de Payá, Rosa María Payá, de inmediato cuestionó dicha versión sosteniendo que la familia había recibido información de los sobrevivientes con respecto a que el auto había sido impactado reiteradas veces por otro vehículo. ''Así que pensamos que no fue un accidente'', según dijo a CNN en Español. ''Querían herir y terminaron matando a mi padre''. La familia también dijo que Oswaldo Payá había sido objeto de un incidente similar dos semanas atrás en La Habana. En retrospectiva ahora se dan cuenta que el incidente fue una advertencia del régimen.
¿Por qué el gobierno cubano habría de considerar a Payá como una
amenaza tal como para querer asesinarlo? Era uno de los opositores
más prominentes a la dictadura castrista, un
activista católico que fundó el Movimiento
Cristiano Liberación en 1988. Se lo conoce por el Proyecto Varela, una
petición que impulsó en 2002 que llamaba a elecciones libres y otros derechos.
Eso enfureció al gobierno cubano, que respondió a través de la Asamblea
Nacional con una enmienda constitucional que convierte como irrevocable al
sistema comunista en Cuba. En marzo de 2003 siguió con la ''Primavera Negra'',
arrestando a los 75 activistas cubanos más prominentes.
Pero el gobierno no
arrestó a Payá, debido
al reconocimiento internacional que había logrado. El
Parlamento Europeo lo premió con su Premio
Sakharov por la Libertad
de Conciencia en 2002; ese año también fue nominado para el Premio Nobel de la
Paz por cientos de parlamentarios en una campaña impulsada por
su amigo Vaclav Havel,
el fallecido ex presidente de la República Checa. A diferencia de Aung San Suu Kyi de Birmania y Liu Xiaobo de China, para quienes
Havel también hizo campaña, Payá jamás recibió el Premio Nobel. Pero era un
activista del mismo porte - un centrista dentro de la oposición, comprometido
con la no violencia y la reconciliación. Payá se oponía al embargo de Estados Unidos hacia Cuba,
por lo cual era criticado por varios opositores al régimen castrista.
Si bien otros activistas habían reemplazado a Payá en años
recientes en la vanguardia del movimiento democrático cubano, recientemente
había provocado al gobierno en dos cuestiones de gran sensibilidad. En mayo,
Payá rompió un largo silencio cuando criticó
duramente un artículo en una publicación católica que defendía
el diálogo del Arzobispo
de La Habana, Cardenal Jaime Ortega, con el régimen y atacaba a
los críticos al cardenal. Payá acusó a los autores del artículo de buscar crear
''una confrontación artificial entre la oposición y la iglesia'', llamándolos
''comisarios políticos'' que buscaban ''un voto de confianza para el gobierno
de Raúl Castro''.
Payá, la voz católica más prominente del país, cruzó una línea roja al desafiar las
relaciones del Gobierno con la Iglesia, que se habían
convertido en pilar de la estrategia de supervivencia del gobierno. También lo
hizo en un momento en que el régimen, envalentonado por el silencio del
cardenal acerca de las detenciones masivas durante la visita del Papa a Cuba en
marzo, no iba a tolerar la crítica.
En la
visita a Bayamo con extranjeros - los dos sobrevivientes del
choque eran católicos de España y Suecia - cruzó otra línea roja. La
ciudad es el centro de un brote de cólera en la
parte oriental de Cuba, y para el régimen, la enfermedad no es sólo un problema
médico sino también una amenaza económica y política. La filtración de
información acerca del brote amenaza los viajes a Cuba y al turismo,
principales fuentes de las divisas que el régimen necesita desesperadamente.
La diseminación de la enfermedad desafía la imagen de Cuba como potencia médica
y podría aumentar el malestar entre los ciudadanos que consideran que enviar
médicos cubanos a Venezuela y otros países perjudica la atención que reciben en
la isla. El hecho de que Bayamo haya experimentado disturbios sindicales en los
últimos dos años y que haya sido un bastión insurrecto durante la guerra de la
independencia cubana contra España y el levantamiento contra Batista despierta
aún más la ansiedad del régimen.
En los próximos días, es probable que surjan más datos sobre la
muerte de Payá. El testimonio de los dos sobrevivientes será decisivo. Al
tiempo que Estados Unidos y otros gobiernos democráticos
lamentan la muerte de Payá, resulta esencial que ellos - y la opinión
mundial - se mantengan alerta
ante los peligros que enfrentan los demócratas en Cuba. Sin solidaridad
internacional, es probable que haya más mártires en la lucha por la libertad
cubana.
"Que
no se engañe nadie, ni los castristas : Cuba será libre" comenzó
diciendo la presidenta del PP madrileño quien consideró imparable el proceso de
transición democrática, que se hará "siguiendo el modelo que Payá diseñó
con valentía heroica durante toda su vida". Aguirre sostuvo que "para los países
occidentales que compartimos las mismas raíces culturales, la existencia de una
dictadura como la cubana es motivo de vergüenza y una llamada a nuestra
responsabilidad". La popular elevó el compromiso para los ciudadanos
españoles, porque, según dijo "tenemos más responsabilidad que nadie a la
hora de plantar cara y colaborar con la disidencia, para lograr que Cuba vuelva
a ser libre y deje de ser una anomalía siniestra entre las naciones de
Occidente a las que Cuba pertenece".
Y hoy cumplen 54 años en el poder absoluto de nuestra querida tierra cubana, 54 años de miseria, 54 años de sufrimiento, 54 años de falta de libertades, 54 años sin poder comer carne de vaca, 54 años sin poder comer langosta, 54 años secuestrados por dos locos hermanos, 54 años que se nos impide salir de nuestra tierra, 54 años de ideología castrista, 54 años lamentando el cheque en blanco que le dimos a Fidel Castro en 1959 en el complejo de Columbia, 54 años sin esperanza, sin ilusión sin ganas de reir y 54 años hartos de estar solos en éste mundo.
Y esperemos que éste año la Comunidad Internacional, nos ayude a quitarnos de encima este régimen asesino y ladrón que ha echo tanto daño a nuestra país, y que la paz reine entre todos nosotros para lograr la transición a la democracía lo mas tranquila y sensata para que podamos vivir en armonia y realizar el mucho trabajo que nos espera para echar adelante el futuro de nuestro país.
Fran País,
No hay comentarios:
Publicar un comentario